Anaiz Díaz de 24 años, y su hijo de cuatro años, y en cuyo caso se maneja la hipótesis de que presumiblemente la joven se lanzó al mar Caribe, mantiene hermetismo entre los habitantes de San Isidro, donde residía la joven.
La casa de Anaiz Díaz, consta de un nivel con escalera al techo, luce abandonada tiene tres puertas de acceso totalmente cerradas y en la puerta principal permanecen dos perros, uno de ellos atado a una cadena y en estado somnoliento, es decir quietos, no ladraron ni mostraron señal de atención ante la presencia de personas.
Se recuerda que el jefe de Bomberos del Distrito Nacional informó que si una persona se lanza en la zona señala, no tiene probabilidades de vida.
La Policía Nacional obtuvo un video donde ve a la joven desmontarse del vehículo, pero no se puede apreciar si se lanzó al mar. Pero tampoco dijeron si vieron a la joven irse del lugar en otro vehículo. El asunto está bien raro señores, los cuerpos no aparecen en el mar, pero tampoco el video registra que se retirara a otra parte.
La joven universitaria había terminado una relación con su compañero sentimental, aunque los familiares insisten en que ésta no tenía motivos para arrojarse a las aguas del mar Caribe.
La versión fue confirmada a la prensa por un tío de la joven identificado como Nicolás Díaz, quien mantiene la esperanza de hallarla con vida a ella y al pequeño de cuatro años.
“Cuando viene a ver ella está escondida por ahí. Yo no creo que ella se tiró, porque ni siquiera ha aparecido el cuerpo. Ella es rebelde, discutía y peleaba con su papá. Hacía cosas fuera de lo normal, por eso es que uno no cree que ella se haya tirado al mar”, manifestó a los reporteros.
Ojalá y este por hay con vida
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